De un mail de una lectora:
(...) Terminé de leer Los estantes vacíos y te digo estoy tentada a releerlo dado que me gustaría "verlo" con los ojos de quien ya conoce otras situaciones/vínculos que fueron pasando y lograr captarlas en su totalidad. Nunca hago esto con tanta inmediatez, es como terminar de ver una película y darle rew para fijar el final … Me gustó mucho, tiene una forma muy atractiva para quien lo lee. También me quedó una sensación (que no la analicé mucho…) y que tiene que ver con los vínculos entre los personajes, pero no me refiero a la definición exacto del vínculo, sino a una sensación de individualidad o soledad casi involuntaria. A ver si logro explicarme: es como si estuvieras acompañado por quien sea (alguien cercano o no a tus afectos) pero de todas formas queda implícita que estás solo, como si el otro no te llegara. Yo viví dos años sola en departamento (te lo aclaro porque creía que no podría vivir en otro lugar que no fuera una casa de barrio) y lo comparaba con la vida de tus personajes que tienen el laverap y el kiosko incorporado, la convivencia con el ruido íntimo ajeno, y pensaba que a pesar de eso ese estilo de vida también me deja esa sensación de soledad, que tal vez no hayas tenido intención de contar pero que a mí me llamó la atención y que tiene que ver con eso de disfrutar estar solo, cocinar tu comida o simplemente quedarte colgado pensando en cosas. Esto obvio que me doy cuenta que habla más de mí que de tus personajes, pero de todas formas te lo comento... Como solía decir mi analista: lo que dice Juan de Pedro, dice más de Juan que de Pedro.
Saludos y gracias por el libro.
24 de abril de 2008
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2 comentarios:
Juan Incardona y Pedro Mairal?.
¿Por qué no "habitación roja"?
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