30 de septiembre de 2009

"El drama de Gondo y la memoria de Nacho"

Por Abel Escudero Zadrayec / Lanueva.com

Apenas se enteró hoy de que el ex basquetbolista Grant Gondrezick podría ir preso por fraude inmobiliario, vía el Twitter de lanueva.com, el escritor bahiense Ignacio Molina, hincha de Napostá y seguidor del albo en la Liga Nacional, se puso mal.

-¡¡Noo, Gondo!! Uno de los mejores extranjeros que jugó en Estudiantes... Y acusaba a los dirigentes de ladrones y borrachos... -tuiteó.

Nacho tiene una memoria impresionante. De hecho, recuerda de la primera a la última palabra que usó en las 188 páginas de su libro Los estantes vacíos: vos empezás a decir una frase cualquiera y el tipo continúa el párrafo como si nada. Y esto no me lo contaron: lo vi en la presentación que hizo el año pasado durante la primera
Feria de Editoriales Autogestionadas, en la Casa de la Cultura de la UNS. (Hay que creerle al maestro de ceremonias Funes Oliveira.)

Cuando Gondrezick vino a jugar en la temporada 1995-96 me tocó entrevistarlo varias veces. Una de ellas resultó emblemática por explosiva: soltó un montón de barbaridades porque estaba harto de que le debieran plata.

El 13 de abril de 1996 me abrió la puerta del departamento que le alquilaban: un dos ambientes lúgubre y de paredes descascaradas en la calle Fitz Roy al 500...


(sigue acá)

29 de septiembre de 2009

En imprenta



Guillón City

Primero Guillón dijo...

He visitado su blog a partir que en el se nombra a la Ciudad de Luis Guillón. Me ha gustado mucho. Lo invito a visitar mi blog "http://www.guilloncity.blogspot.com" y dejarme un comentario. Un cordial abrazo. Wilfredo

11:01 PM

28 de septiembre de 2009

Ceviche

(...)
Eso es. No hay televisores prendidos ni apagados. Suena, muy bajo pero puede escucharse si se presta atención, un disco de valses de Chopin, puro piano.
Lo único que se ve de la actividad de la cocina es una ventana, por sobre el nivel del mostrador, a través de la cual se pueden ver los fierros y el baile de los pollos que se rostizan girando. Lo pollos a la brasa se doran, y como de oro dan vueltas para fundirse y convertirse en fornidas estatuas, ídolos fugaces, esculturas de carne y piel que se comen pronto. Ahora giran sobre su eje, los pollos, y juntos dan una gran vuelta que los equilibra, rotación y traslación de estos planetas crocantes que siguen el ritmo del fuego, la cocción dorada, y el ritmo de los valses de chopin que los anima.
(...)


(fragmento de Ceviche, de Federico Levín)
El Colo no ayuda

http://cocodrilocolorado.blogspot.com/

24 de septiembre de 2009

"El nuevo es para papito"

La segunda parte de la publicidad de la Afip protagonizada por Don Carlos, que a primera vista puede parecer hecha en broma y hasta causar rechazo, tiene más contenido ideológico de lo que parece. El corto no muestra a un empresario políticamente correcto y extremada, e inverosimilmente, dadivoso. La publicidad hace una pintura del típico empresario chanta argentino, e intenta desmostrar que hasta a él mismo le conviene -aun a desgano- atenerse a los planes recaudatorios del Estado.

"(...) Que ellos vean su nombre en la revista Ñ es una compensación narcisista para una autoestima siempre destrozada (...)"

Salió COSMO LIT

22 de septiembre de 2009

¿La última? reseña de Los estantes vacíos

(Publicado en el número de septiembre de la revista española Culturalia)

Por Silvia María Alvarez

Ignacio Molina nació en Bahía Blanca en 1976 pero reside en Buenos Aires. Con poco menos de treinta años se puso a dar forma a “Los estantes vacíos”, un conjunto de quince relatos sobre la juventud porteña donde los personajes se cruzan, aparecen y desaparecen de relato en relato. Con maestría nos enseña cómo mostrar un mundo de subjetividades describiendo poco más que rutinas.


No tenemos nada, sólo días por vivir, estanterías por llenar y páginas que escribir. Pero los días pasan y los estantes siguen vacíos. No hay héroes dentro de estas páginas. Tampoco hay gente que sufra, que se queje, ame, olvide… Hay personas que suben y bajan, hacen de comer, se cruzan, compran… Gente que por muy acompañada que esté nunca deja de dar la sensación de estar alienada en su propio mundo. Personajes arrojados al vacío de sus días, que no saben cómo son, cómo será su futuro o qué significó su pasado. Exactamente como en la vida real, esa que nos acompaña la mayor parte de los segundos, en la que no hay certezas, ni buenos, ni malos. Y aunque parezca que no pasa nada, no dejan de fluir los días, la existencia de los personajes.

Hay algo de lo que parece que se prescinde en este libro: la imaginación, los deseos. Los personajes siguen su curso y no se plantean más. Quizá por las circunstancias, quizá por reflejar una edad que ya empieza a acortar las alas, quizá porque es la mejor manera de adaptarse…O para mostrarnos quiénes somos. No esos que queremos ser, ni como nos ven los demás, ni siquiera los que creemos ser, sino los que realmente somos en el día a día. Nada. Sólo estamos.

Ellos somos todos, personas que buscan y buscan, sin saber qué. Y sin haber quizá nada que encontrar. Pero que no cejan en su empeño. Se sienten los personajes como "mini-Segismundos", que sin ser reyes ni príncipes, están encerrados en la cárcel de sus propias rutinas y que no paran de soñar con “otro estado más lisonjero”. En una actitud tremendamente honesta, Molina ha preferido expresar algo de lo que no habla, para que cada uno dibuje con sus propios sueños los espacios en blanco de los personajes, haciéndolos así, sin darnos cuenta, algo más nuestros.

Los personajes se merecen una reseña especial. Todos se parecen y todos
son distintos. Sólo dos tienen en sus manos cambiar el rumbo errático y en suspensión de los demás. Pero no, acaban fundiendo sus historias con la de los demás, no son capaces de formar una biografía "especial", ni de elegir. Como todos, la rutina los arrastra. Aunque el final del libro puede hacer pensar otra cosa… quizá haya lugar a la esperanza, la renovación, la plenitud. Quizá…

150 monos

El nuevo número de la revista dirigida por Carolina Berduque, Juan Cruz de Sabato y Santiago Sánchez Santarelli, puede leerse clickeando acá.

21 de septiembre de 2009

18 de septiembre de 2009

16 de septiembre de 2009

Premio Nuevos Narradores

E l R o j a s c o n v o c a
PREMIO NUEVOS NARRADORES
El Centro Cultural Ricardo Rojas lanza la segunda edición del PREMIO NUEVOS NARRADORES y convoca a escritoras y escritores inéditos a participar de este certamen bianual que busca constituir una auténtica cantera de nuevos narradores argentinos, al tiempo que ofrece un espacio editorial.
El jurado, integrado por los escritores Federico Jeanmaire, Mariana Enríquez, y Laura Isola, del área del Letras del Centro Cultural Ricardo Rojas, seleccionará diez relatos que serán incluidos en una antología. La publicación formará parte de la colección Libros del Rojas que edita la Universidad de Buenos Aires.
Además, el jurado distinguirá hasta tres textos de los mismos seleccionados con un reconocimiento especial: los narradores elegidos participarán de un laboratorio intensivo de experimentación literaria dictado por Federico Jeanmaire y Mariana Enríquez, durante mayo, junio y julio de 2010.
Destinado a escritores de entre 21 y 35 años de edad que presenten relatos inéditos de entre 5.000 y 20.000 caracteres.
Los relatos se recibirán entre el 5 y el 30 de noviembre de 2009, en la oficina de Producción del Centro Cultural Ricardo Rojas (Av. Corrientes 2038), de lunes a viernes de 10 a 18hs.
El fallo del jurado se dará a conocer el 1° de abril de 2010.

14 de septiembre de 2009

11 de septiembre de 2009

Este domingo leo acá:

Ciclo de solistas
SOLAS Y SOLOS
*
Escritores:
Ignacio Molina
Juan Manuel Strassburger
*
Cantautores:
Poli del Tomate
Antolín
Julietita
Chico Ninguno
*
Domingo 13/9 20 horas
entrada $8
Av. Corrientes 5552
(a dos cuadras de la estación Malabia del subte b)

8 de septiembre de 2009

(...) empezó a sonar 15 Steps, canción intensa y frenética. Un buen ritmo para caminar las tres cuadras hasta la parada de la 502. Enfrente la plaza Rivadavia iluminada, a unos metros la sede de Olimpo donde iba a natación, atrás mío un aire acondicionado que goteaba. Bodysnatchners es pura energía, las guitarras te llevan en un viaje en cámara rápida y al final lo ves a Yorke enloqueciendo frente al micrófono (...)

En la fría noche bahiense, mientras espera la 502 y viaja hasta Pedro Pico, Matías escucha el último disco de Radiohead.
Escribo, pienso, leo

Escribo
pienso
leo
traduzco veinte páginas
oigo el informativo
escribo
escribo
leo.
Dónde estás
dónde estás.

.

Si muriera esta noche

Si muriera esta noche
si pudiera morir
si me muriera
si este coito feroz
interminable
peleado y sin clemencia
abrazo sin piedad
beso sin tregua
alcanzara su colmo y se aflojara
si ahora mismo
si ahora
entornando los ojos me muriera
sintiera que ya está
que ya el afán cesó
y la luz ya no fuera un haz de espadas
y el aire ya no fuera un haz de espadas
y el dolor de los otros y el amor y vivir
y todo ya no fuera un haz de espadas
y acabara conmigo
para mí
para siempre
y que ya no doliera
y que ya no doliera.

.

Ya no será

Ya no será, ya no viviremos juntos, no criaré a tu hijo
no coseré tu ropa, no te tendré de noche
no te besaré al irme, nunca sabrás quién fui
por qué me amaron otros.

No llegaré a saber por qué ni cómo, nunca
ni si era de verdad lo que dijiste que era,
ni quién fuiste, ni qué fui para ti
ni cómo hubiera sido vivir juntos,
querernos, esperarnos, estar.

Ya no soy más que yo para siempre y tú
Ya no serás para mí más que tú.
Ya no estás en un día futuro
no sabré dónde vives, con quién
ni si te acuerdas.

No me abrazarás nunca como esa noche, nunca.
No volveré a tocarte. No te veré morir.

.
(de Idea Vilariño)
el perro negro parado en el techo de chapa
cuando oscurece es el dios de la cuadra
este poema es una máquina que no funciona bien
tengo que correr antes de que me alcance el humo
arreglar todo con un beso
un rosario es un adorno cargado de sentido
si me lo cuelgo lo vacío
este cuaderno se termina
las flores se mueren en los árboles
yo no miro yo pienso
nunca caminamos juntos
en esta temperatura

.
(de Mercedes Halfon)

7 de septiembre de 2009


2 de septiembre de 2009

1 de septiembre de 2009

Tres años


Hace tres años, horas después de que pasara todo esto,
yo entraba en un locutorio para contar esto.