–¿Flaco, adónde querés ir de vacaciones?
–No sé, yo iría a alguna playa de Uruguay, pero debe estar re caro . . . Podríamos ir a la costa argentina . . . qué sé yo . . . a San Bernardo, ponele . . .
–¿¿En serio me estás diciendo?? . . . ¿Por qué San Bernardo?
–Qué sé yo . . . me gusta el nombre. Me resulta simpático, además . . . se me hace cómodo para ir con el bebé, un ambiente familiar, bien clase media . . .
–¿Simpático, decís? . . . Además, ¿desde cuándo te gustan los ambientes familiares? . . . Me estás jodiendo, no te puede gustar el nombre . . . La vida es otra cosa, no los cuentitos que vos escribís . . .
12 de noviembre de 2007
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
3 comentarios:
y la tensión que genera elegir el lugar vacacional. yo sí me quiero ir a una playita de uruguay, que onda esa fantasía de la playita desierta? seguro se llena tanto de gente como mar del plata ja
La vida es otra cosa, vaya uno a saber. Como cada año uno se da cuenta que el pre-vacaciones es terrible y pasan estas cosas...
¿pero entonces, se puede saber q es la vida? ya lo sé, es una pregunta re mafalda, pero la tenia q hacer. andate a san bernardo, mirá. yo fui el año pasado unos días y me la pasé leyendo re tranqui. no puede pasar nada malo...
Publicar un comentario